Testimonios
Ma. del Carmen V. de Arruzan.... qué título le pongo a este testimonio?
Ma. del Carmen V. de Arruza / 16 de Noviembre 2009
En mi larga vida en México he conocido personas maravillosas que me han llenado mi existir.
De las primeras amistades que Carlos me presentó fueron a Silverio Pérez y a La Pachis. –Silverio para mí, siendo yo aficionada a los toros me cautivó con su toreo y grandeza en el ruedo. Lo vi mucho en tentaderos donde el torero torea, con más gusto y tranquilidad.
No voy a hacer un análisis de Silverio como torero pues ya los grandes críticos taurinos lo han hecho. Lo que más me impresionó de él fue su gran calidad humana. Siempre fue el hombre sencillo, simpatiquísimo y sin ningún asomo de orgullo y soberbia; amigo sincero, cariñoso, con sentido del humor, dispuesto a que su presencia fuera agradable en todo. Nunca lo oí hablar mal de nadie, mucho menos de un compañero.
Me impresionaba su amistad con Arruza pues siendo ambos figuras del toreo, se tenían un gran cariño y respeto. Creo yo que ese respeto era debido a que nunca hubo el menor asomo de celos profesionales pues eran dos formas distintas en su torear.
Mi recuerdo para Silverio Pérez es imborrable, lo traté mucho y sentí su calidad humana dentro y fuera del ruedo.
Esos son los grandes hombres.